El dinero no crece en los árboles (¿o sí?)

imageHace poco leí el libro "Secretos de la mente millonaria". En él, T. Harv Eker plantea algo muy interesante: tu relación con el dinero (durante toda la vida) depende en gran medida de lo que te decían tus papás sobre el dinero cuando eras chico.

Lamentablemente, a la mayoría de la gente lo que le dicen durante toda su niñez son cosas como "No tenemos dinero", "El dinero es la causa de todos los males", "Somos pobres, m'ijo", etc.

¿Cómo afecta esto? Según el autor, por ejemplo, si a una persona siempre le dijeron que "No tenemos dinero", eso se quedará programado en su subconsciente. Cuando sea grande y empiece a ganar dinero, subconscientemente va a hacer cosas que logren cumplir eso. Por ejemplo, comprar muchas cosas a crédito (para asegurarse de que el dinero que reciba se irá de inmediato) o incluso gastar en baratijas y cosas inservibles o no duraderas. De esta manera, por mucho dinero que gane, siempre le ocurrirá que no tiene dinero. Según su subconsciente, ése es el deber ser.

Entonces me puse a pensar. ¿Qué me decían a mí mis papás sobre el dinero cuando era niño?

Afortunadamente, mis papás nunca me dijeron nada por el estilo. O no que yo recuerde.

imagePor el contrario, tenía una tía que me consentía mucho. Ella era gerente de una sucursal de Bancomer. Claro que para un niño de cinco años, eso significaba que era dueña del banco. Y era muy claro. Cada vez que yo iba de compras con ella --una o dos veces al mes-- yo le pedía un juguete. Ella sólo tenía que ir al banco, meter su tarjeta en una ranura de un aparato incrustado en la pared, y una persona que estaba del otro lado de la pared le pasaba, por otra ranura, todo el dinero que ella quería. ¿Por qué? Pues porque ella era dueña del banco, y podía sacar todo el dinero que quería; nunca se iba a acabar. Y así me compraba el juguete que quería. Un juguete a la vez; tampoco se trataba de verse avorazado.

Quizá mis papás no tenían todo el dinero del mundo, pero había otras personas que sí tenían todo el que querían.

También recuerdo que ya entrada la primaria, mi papá hizo conmigo un trato. Yo era muy ñoño y adicto a los videojuegos, así que cada mes que mi boleta de calificaciones trajera dieces, mi papá me llevaría al centro a comprarme un cassette de Nintendo.

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imageDescubrí que realmente no era difícil conseguir esos dieces, y así mi papá cumplía con su parte del trato, sin falta. Hubo una o dos veces que quizá dijo algo como "Híjoles, ahora sí me la pusiste difícil, no hay mucha lana, pero ni modo, un trato es un trato." Y yo siempre obtenía mi cassette de Nintendo. Y así, durante media primaria y parte de la secundaria, yo me hice de una muy decente colección de veinte cassettes de Nintendo y otros tantos de Super Nintendo. Cada mes, un cassette.

Era un poco como trabajar por un sueldo mensual. Pero nunca me dijeron "no m'ijo, este mes no hay dinero."

Conclusión: no es difícil conseguir lo que quiero. Siempre se puede, con un poco de esfuerzo.

Uno de esos juegos era el excelente The Legend of Zelda: A Link to the Past. En ese juego, conforme ibas avanzando, al eliminar a algunos enemigos aparecían rupias que ibas juntando. También había algunos personajes que te pedían favores que te pagaban con rupias, y, si en vez de sólo avanzar y avanzar hacia tu meta, te detenías un poco a buscar entre las piedras y matorrales, encontrabas más rupias.

imageCon esas rupias podías luego comprar armas, pociones de salud y otros objetos útiles. El problema era que sólo podías cargar 999 rupias. Si agarrabas una más cuando ya tenías el límite, ésta simplemente desaparecía. Una rupia perdida. Se iba al ciberlimbo virtual y no la aprovechaste. No llegabas a 1000, no te las contaban extra, nada. 999 era el máximo. Y esto era realmente un problema, porque yo muy fácilmente llegaba a 999, y seguía encontrando más. No porque aparecieran en mi camino, sino porque dedicaba un poco de tiempo a conseguirlas.

Entonces tenía que gastarlas... entrar a concursos, comprar muchas pociones de salud --de las azules, las más caras-- y regalarle rupias a cuanto indigente se me atravesara proponiendo contarme una historia interesante por unas cuantas rupias (historias que a veces no eran tan interesantes). Gastaba y gastaba y compraba y compraba y nunca se me acababa el dinero. Siempre tenía más de lo que podía guardar.

Y este juego lo jugué cientos de veces, toda mi mi pubertad y adolescencia. Y así subconscientemente me acostumbré a que, buscándole un poco, siempre hay dinero suficiente para todo lo que quiero, y más.


Tal vez pudieran pensar que todo esto me llevó a ser una persona mimada y que cree que todo es fácil. Por el contrario. Aprendí a trabajar duro y hacer un esfuerzo por conseguir las cosas que quiero. Pero afortunadamente, no tengo la mentalidad de que "por más que trabaje siempre seré pobre."

¿El resultado? Nunca me ha faltado el dinero para hacer las cosas que quiero. Conseguí una beca para ayudarme a pagar la maestría; con lo que he ganado de mi trabajo he podido comprarme varios lujos; nunca he tenido que decir que no puedo hacer algo por no tener dinero (salvo la vez del congreso de robótica, pero eso no cuenta porque realmente no quería ir). Y hasta he encontrado oportunidades de tener un ingreso extra de por vida. Pronto me pagarán por estudiar en el extranjero, y sé que lo que viene después será igual de bueno o mejor.


Sé que habrá gente que no estará de acuerdo. Que dirá que es porque ahora vivo con mis papás y cosas así. Adelante, pueden opinar. No es mi problema, y, si piensan un poquito, ése no es el punto. Aunque su niñez haya sido diferente a la mía, siempre pueden reprogramarse.


A ti, ¿qué te decían sobre el dinero cuando eras niño?


>>el libro<<

9 comentarios:

Unknown dijo...

pues a mi tambien me compraban juguetes en la primaria, y sacaba 10's en la primaria tambien, eso es facilísimo ja, ya en la secundaria y preparatoria sacaba puro 6.... tal ves fue porq yo nunca acabe el Zelda ja... si, debe de ser por eso...

Miguel Matus dijo...

Jvr: Interesante reflexión acerca del dinero,me echaré un clavado a mi circunstancia y veré que dice mi inconsciente o subconsciente al respecto. Saludos

Ninja Peruano dijo...

A mí me dijeron:
Compra piratería porque pagar 900 por juego es una mentada de madre.

Bueno ok, eso me lo dije yo.
Tengo una vida pirata y me vale madres.

El mecartistrónico dijo...

Zombra: creo que no entendiste el punto.
No se trata de terminar el Zelda.

Se trata de tener suficiente para darle al changuito que te abre la puerta del primer castillo. Y para aventar a la fuente de los deseos para poder cargar más flechas y bombas.

Miguel: siempre es interesante recordar y analizar cómo nos afectan las cosas que pasamos de chicos, no?


Ninja: en mis tiempos, los cassettes de Nintendo costaban 100 pesos. 150 a lo mucho. Los de Super Nintendo empezaron a costar 200... 250... y lo demás es historia.
Que es en lo que me costaba más trabajo sacar 10. En historia y en civismo.

Pero, ya ves? Por eso tienes un enemigo pirata (vampiro).

El Arturelo dijo...

Yo estoy jodido y aunque también me pagan por estudiar y tengo un pan que llevarme a la boca, tengo bien arraigada la mentalidad de "Mijo nosotros somos pobres y el pinche dinero no lo cagamos"

Y pues en lo personal, no me quiero reprogramar creo que nosotros los pobres tambien somos muy felices jaja

Además como dice el ninja sudamericano, la piratería es también una opción

Saludos

Xenomorph dijo...

Psss a mi me daban documentales del National Geographic... sólo que subieron de precio los méndigos VHS y después me chamaqueaban mis padres, comprándome versiones más económicas en precio y calidad visual... la promesa era "el documental" no el "origen del mismo"... quizá por eso ahora cuido mucho más lo que digo.
Ah... pero la pregunta era sobre el dinero ¿no? Pss nunca he sido muy financiero pero sí cuido mi dinero, gasto en lo que tengo que gastar, invierto en lo que tengo que invertir y gano lo que... bueno, no gano lo suficiente pero me alcanza.

Rodrigo dijo...

Todo el mundo sabe que el dinero no crece en los árboles, las plantas de dinero son arbustos. Al igual que las plantas de salchichas y de monedas de 10 pesos...

Pät dijo...

el dinero? se consigue y si no pues se hereda ¿no?

Rodrigo dijo...

Vine acá porque soy pobre y necesito dinero fácil. ¿Qué pues?